
"Soy un perseguido político", afirma el primer ministro en
televisión. - Ayer el tribunal constitucional invalidó los puntos clave
de la ley del legítimo impedimento, a la que el mandatario se había
acogido para no acudir a declarar en los procesos
La Fiscalía de Milán investiga al primer ministro Silvio Berlusconi por
sendos delitos de prostitución infantil agravada y concusión (abuso de
poder sobre funcionario público). Según informa la web de Il Corriere della Sera,
el auto de acusación afirma que, "con el objetivo de ocultar que fue
cliente de una prostituta menor de edad durante numerosos fines de
semana en su casa de Arcore", Berlusconi "trató de asegurarse la
impunidad de ese delito llamando la noche del 27 de mayo de 2010 a la
comisaría central de Milán" para obligar a los funcionarios de policía,
"abusando de su condición de primer ministro, a confiar indebidamente a
la marroquí de 17 años Karima Ruby El Mahroug, que se había fugado de un centro de menores, a la consejera regional lombarda del PDL Nicole Minetti".
El delito de concusión está penado con entre 4 y 12 años de
reclusión, y tipifica los casos en que "un funcionario público abusa de
su condición y su poder para obligar a alguien a dar o prometer, a él o a
un tercero, dinero u otros favores". Al primer ministro se le achaca
además un delito agravado de prostitución de menores, que castiga con
entre 6 meses y 3 años de cárcel a quien realice actos sexuales con un
menor de entre 14 y 18 años, a cambio de dinero u otra retribución. Se
trata del único caso de prostitución en que el ordenamiento italiano
prevé sanciones penales para los clientes.
La investigación del caso Ruby
ha salido a la luz esta mañana porque los fiscales han ordenado varios
registros en Milán para buscar pruebas. La policía ha acudido al
despacho de Giuseppe Spinelli, un hombre de confianza de Berlusconi que
administra los negocios familiares del primer ministro, y que en el
pasado fue investigado por diversos asuntos, como las compras de las
villas de Macherio y de Arcore. Spinelli, que no resulta investigado, ha
afirmado a los policías que el despacho forma parte "de la secretaría
política del honorable Berlusconi", y según fuentes cercanas al primer
ministro los investigadores han renunciado al registro y han abandonado
la oficina.
La policía está registrando en este momento el
despacho de la consejera regional de Lombardía Nicole Minetti, la ex
higienista dental que atendió a Berlusconi tras la agresión sufrida en
la plaza del Duomo de Milán en diciembre de 2009. Minetti está acusada
de inducción a la prostitución, tanto adulta como de menores. La misma
hipótesis de delito se imputa a Lele Mora, agente de velinas cercano a
Mediaset, y de Emilio Fede, veterano presentador del telediario del
Canal 4, también perteneciente a la galaxia televisiva de Berlusconi.
Antes de conocerse la nueva investigación, Berlusconi ha comentado en Canal 5 la sentencia del Tribunal Constitucional que ayer tumbó los dos apartados esenciales de la ley de Legítimo Impedimento.
"No me esperaba otra cosa, además esa ley no la quise hacer yo sino mis
colaboradores", ha dicho el primer ministro, que ha vuelto a atacar a
los jueces de Milán que intentan juzgarle por corrupción judicial (caso Mills), apropiación indebida (Caso Mediatrade)
y fraude fiscal (caso Mediaset): "Son procesos inventados, ridículos,
grotescos, ya he jurado por mis hijos que no he cometido ningún delito.
Si me entero de que en los tribunales que me juzgan la mayoría de los
jueces es de izquierda iré a la televisión a explicar cómo son las
cosas". Y ha añadido: "Todos saben que hay una persecución política de
los jueces de la izquierda desde que decidí saltar a la arena política".
fuente: el pais